La escasez de agua es un problema mundial, pero en países como Israel, Arabia Saudita y España no se esperan a las crisis para buscar soluciones.
Israel es líder mundial en desalinización, más del 80% del agua potable proviene de 5 plantas desalinizadoras que convierten agua de mar en agua apta para el consumo.
Arabia Saudita también depende en gran medida de este método, con más de 30 plantas que abastecen a las principales ciudades.
España utiliza la desalinización para abastecer a regiones como las Islas Canarias y la Costa Mediterránea, mitigando la falta de lluvias.
Singapur, Australia y California destacan por la reutilización de aguas residuales.
Singapur ha desarrollado el programa NEWater, que recicla aguas residuales para convertirlas en agua potable de alta calidad, cubriendo hasta el 40% de sus necesidades.
Australia implementa sistemas de tratamiento avanzado para reutilizar aguas en riego agrícola, industria y consumo doméstico no potable.
California ha invertido en infraestructura para la purificación de aguas residuales, aliviando la presión sobre sus reservas naturales, ya que tienen muy claro la importancia de reabastecer los mantos acuíferos.
En captación y almacenamiento de agua de lluvia destacan India y Brasil.
Brasil ha desarrollado programas de recolección de agua de lluvia en áreas rurales del noreste, donde las sequías son recurrentes.
India implementa sistemas comunitarios de captación para abastecer a las aldeas y reponer acuíferos subterráneos.
Países más desarrollados como Alemania, Japón y Dinamarca tienen una gestión eficiente del agua y reducción de pérdidas.
Alemania ha modernizado su infraestructura hídrica para reducir pérdidas, con una eficiencia superior al 90%.
Japón emplea tecnologías avanzadas de monitoreo para detectar fugas en tiempo real y optimizar el consumo.
Dinamarca aplica un modelo de precios escalonados para incentivar el ahorro de agua entre los consumidores.
Israel, España y Países Bajos impulsan desarrollos agrícolas sostenibles.
Israel usa riego por goteo de precisión para optimizar el consumo de agua en la agricultura, como sucede en la Costa de Hermosillo.
España fomenta cultivos resistentes a la sequía y sistemas de riego eficiente en regiones áridas.
Países Bajos aplica tecnologías de riego inteligente que maximizan la productividad con un uso mínimo de agua.
En México, este miércoles, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó el Plan Hídrico que cosiste en 17 Proyectos de Infraestructura con una inversión sexenal de 122 mil 600 millones de pesos, donde destaca la construcción de presas.
Dice un amigo que hay que ayudarle a la suerte, con esta noticia, y la falta del uso de tecnología, información, y la experiencia de otros países, siento que el tema del agua en México se lo estamos dejando al Dios Tlaloc.
Mientras en Sonora, la comunidad de Mesa Tres Ríos, con más de cien años de su fundación sigue sin energía eléctrica, y casi sin agua.
Nácori Chico, cabecera municipal, con más de mil habitantes tiene que recibir agua de pipa porque la presa y el pozo que abastecían el lugar están secos.
Lo mismo sucede con las poblaciones cercanas como el Sauz y Buena Vista.
¿De los 7 mil 500 millones de pesos, o de los 500 millones que dicen que empezarán a invertir en Julio de este año en Sonora, habrá manera de que por lo menos se paguen 2 pipas diarias para los Sonorenses?
¿O nos esperamos a que concluyan las presas para abastecerlos de agua?
La danza de los números perversos.
Millones de pesos por aquí y por allá, y PERSONAS con sed.
Gracias por su atención y tiempo, y por favor, ¡Sonría!, recuerde que podría ser peor.