Desde hace más de cuatro meses, la Unidad Médica Familiar No. 1 del IMSS opera sin elevador, lo que ha complicado el acceso a consultas para adultos mayores y personas con discapacidad, quienes en algunos casos deben subir escaleras para recibir atención.
El elevador fue retirado en octubre debido a fallas y será reemplazado por uno nuevo para evitar futuros problemas, según informaron las autoridades.
Aunque se instalaron dos consultorios emergentes en la planta baja para atender a pacientes con movilidad reducida, algunos servicios siguen brindándose en el segundo piso, lo que representa un reto para muchos derechohabientes.
Se espera que la obra concluya en un par de semanas, ya que el plazo establecido para la instalación del nuevo elevador es de seis semanas. Mientras tanto, los pacientes continúan enfrentando dificultades para acceder a sus consultas.