Tras 22 meses, 150 conciertos, 10 millones de asistentes y una recaudación estimada en más de 2,000 millones de dólares, Taylor Swift ha puesto fin a su monumental The Eras Tour. El cierre tuvo lugar en Vancouver, Canadá, donde la cantante, emocionada, describió esta experiencia como “lo más poderoso, eléctrico y retador” de su vida.
Desde su inicio en marzo de 2023 en Glendale, Arizona, la gira se convirtió en un fenómeno cultural y económico, dejando un impacto sin precedentes en la industria de la música y en las economías locales de las ciudades que visitó. Con una asistencia promedio de 70,000 a 80,000 fans por noche y boletos agotados en todos los países que visitó, The Eras Tour marcó un antes y un después en los conciertos globales.
Más que una gira: un fenómeno global
El espectáculo no solo rompió récords de recaudación, sino que también generó un movimiento social. Desde los brazaletes intercambiados por los fans hasta las transmisiones piratas en TikTok, cada detalle de los conciertos fue tema de conversación. Además, la gira dejó huella en el ámbito económico: solo en Londres, donde ofreció ocho conciertos consecutivos, generó mil millones de dólares para la economía británica.
Invitados, sorpresas y legado
Cada noche, Swift interpretó un setlist de 44 canciones, sumando más de 125 temas sorpresa a lo largo de la gira. También subieron al escenario invitados como Florence Welch, Sabrina Carpenter y Gracie Abrams, mientras que figuras como Paul McCartney, Guillermo de Inglaterra y Drew Barrymore estuvieron entre los asistentes.
Uno de los momentos más comentados ocurrió en Londres, donde presentó a su pareja, el jugador de fútbol americano Travis Kelce, consolidando su relación en el ojo público.
Un éxito que trasciende la música
La influencia de Swift no se limita a los escenarios. Su concierto llevado al cine recaudó más de 260 millones de dólares, y su libro sobre The Eras Tour ya es el más vendido del año en Estados Unidos. Este impacto le valió ser nombrada Persona del Año por la revista Time, reconociendo su capacidad para conectar con millones de personas y transformar la cultura pop.
Con el final de The Eras Tour, Taylor Swift no solo reafirma su lugar como una de las artistas más influyentes de nuestra época, sino que cierra un capítulo histórico en la música. «Ya solo queda barrer el confeti», dijo al despedirse, marcando el fin de una era inolvidable.